Así es, en un intento por demostrar que es posible lanzar al espacio un equipo de bajo coste y sencillo de construir, la NASA y Android se unen para crear nuevo satélites.
Estamos hablando de PhoneSat, el nuevo proyecto que entre sus componente incluirá nada menos que un smartphone.
Un smartphone Android para ser más exactos, que se ubicará en el primer prototipo, el Nexus One. Mientras que en otro se utilizará un Samsung Nexus S, para realizar varias de las funciones clave del satélite.
Tal y como explica la NASA en su sito web oficial:
Éstos teléfonos inteligentes ofrecen una amplia gama de capacidades necesarias para los sistemas de satélites, incluyendo rápidos procesadores, sistemas operativos versátiles, múltiples sensores en miniatura, cámaras de alta resolución, receptores GPS y varios radios.
Y añaden:
Éste acercamiento permite ver a los ingenieros qué capacidades puede ofrecer la tecnología comercial, en vez de tratar de diseñar a medida, soluciones para satisfacer requisitos establecidos.
El costo aproximado de construcción del satélite es de US$ 3.500 dólares y su tamaño, igual de pequeño, casi igual que una taza.
El PhoneSat sentará las bases para las futuras generaciones de satélites en miniatura, los cuales serán usados para mejorar los próximos viajes espaciales. Por ahora, ya han sido probados en ambientes extremos, tales como cámaras de vacío o vuelos suborbitales, en espera de su estreno espacial.
Y según cuentan, tres de ellos serán llevados a bordo del primer vuelo del cohete Antares de la Orbital Sciences Corporation, aproximadamente a fin de año.
Nada mal ¿cierto?